miércoles, 10 de junio de 2015

Ánimo, buen amigo.

Me cuenta que Eugenio (hace tiempo que no lo veía y pregunté por él) tropezó y cayó haciéndose mucho daño, incluso le ingresaron de urgencias en el hospital. Ya está en casa, pero se temió... Lo siento, viejo amigo.

El miedo o lo que sea por lo que pueda suceder a personas que queremos o a nosotros mismos pudiera ser una deuda que no tenemos y nos empeñamos en pagar. Asuntos de mala conciencia. Cuando el miedo se hace fuerte en nuestro vida, inconscientemente, las cosas van a peor. Solo el amor se debe hacer fuerte en nuestra vida, pero somos débiles y temerosos de Dios y María. "No pecarás". ¿Y por qué no? De tanto temer a todo lo que nos imaginamos nos echamos a perder al acabar con la capacidad de hacer el bien y creer que todo es posible. Hasta la eternidad de lo que amamos...

No hay comentarios:

Publicar un comentario