viernes, 22 de mayo de 2015

Un día es un día.

Mi esposa me quiere fastidiar el viernes... Con lo feliz que yo estaba vaya por Dios. Me dice que es viernes (a mí me lo va a decir) cierre de campaña electoral y que si vamos... 
-¿Adónde vamos, esposa?
-¿Estás idiota? ¡Despierta!. Al cierre de campaña...
-No hay respeto ni valores. Por no haber no hay ni ganas de ir al cierre de campaña... ¿Crees que preguntarán por mí?
-Claro, además conoceremos el programa electoral y cenaremos.
-Ah, ¿nos darán de cenar?
-Solo si vamos...
-Pues más que el programa electoral me interesa el menú...
-Interesado...
-Creí que hablábamos de política, perdona.
-¿Vamos o qué?
-Lo que tú digas, cariño?

De una soy amigo de sus hijas, la Hada Alexia, que por cierto el domingo hace su primera comunión (qué problema se le presenta a su madre y candidata a la vez) y la Niña Atenea, y del otro amigo y vecino, además de ser el único de la calle que me habla. Suena raro decir amigo que me habla, pero las cosas son así en este pueblo, yo nada tuve que ver. Viene de antes. En fin, en este país de indigentes hoy cenamos. Un día es un día.

No hay comentarios:

Publicar un comentario