Tengo un sueño.

Tengo un sueño. Es un día despejado en un lugar conocido con la brisa de un mar a favor. Yo soy el protagonista con una edad que aparento exactamente la de ahora. En un sueño todo es posible al margen de los inconvenientes y alguna ausencia del pasado "y no por irse" (entrecomillo "y no por irse" porque una no se fue, a pesar del tiempo y el silencio). 

En este sueño yo no soy el único protagonista pero eso ya está escrito. Solo espero despertar y ver que Pedro Calderón de la Barca, poeta, mentía cuando dijo "que toda la vida es sueño, y los sueños, sueños son". Y, si no, que nadie me despierte de un sueño que tengo con acceso a tiempos pasados... La vida no es de ensueño. (Hay asuntos que, por inconclusos, la legalidad vigente, en su aplicación, debiera permitir que las partes en digna aprehensión los concluyeran).