Al fin sábado treinta,
el día en el que tienes fundadas esperanzas de que alguien,
algo, o tal vez el tan deseado porvenir
arranque el mal de tus heridas.
Al fin sábado treinta,
el día en el que tienes fundadas esperanzas de que alguien,
algo, o tal vez el tan deseado porvenir
arranque el mal de tus heridas.
Al fin sábado treinta,
el día que el cielo obrará a tu favor
y los nubarrones desaparecerán llevándose tu mala suerte para siempre.
Tu horizonte al fin libre de culpas y otras disculpas.
y los nubarrones desaparecerán llevándose tu mala suerte para siempre.
Tu horizonte al fin libre de culpas y otras disculpas.
Al fin sábado treinta,
el día que al fin volverá tu sonrisa al brillo de tus ojos
donde nunca debió partir (ojos tristes).
Tu sonrisa alegrará la amistad en la distancia.
donde nunca debió partir (ojos tristes).
Tu sonrisa alegrará la amistad en la distancia.
Al fin sábado treinta,
el día que feliz te acordarás de mí y harás que tu nombre ruede hacia al mar.
No le dirás aunque amor te pida:
No le dirás aunque amor te pida:
solo le dejarás alargar sus letras...
Al fin sábado treinta,
Al fin sábado treinta,
el día que tu nombre me contará quién o qué causaba tus males,
irreparables males que no has querido contarme.
Las letras de tu nombre hoy, sábado día treinta, me contarán tus penas que fueron.
¡Felicidades!.
irreparables males que no has querido contarme.
Las letras de tu nombre hoy, sábado día treinta, me contarán tus penas que fueron.
¡Felicidades!.
Ojos tristes...
ResponderEliminarMe acuerdo de ti todos los días, siempre, todos los días.
El mar nos separa pero las letras nos unen, letras tristes o de poesía sublime o de enojos o desencuentros pero letras siempre cruzando el mar.
Un abrazo contento y feliz al leerte como cada día, hoy en especial.
¿Lo leíste?
ResponderEliminarSí.
ResponderEliminarGracias.
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