miércoles, 16 de octubre de 2013

Otro día para el olvido

Una amiga me envía un correo electrónico y me dice que tiene un problema con su ordenador y que cuánto siente no leerme. Que la disculpe. De viejo, veo venir las decepciones sin asomarse. ¡Hay que joderse!, me envía un correo electrónico para decirme que no me puede leer. Y yo, no te preocupes mujer, ya me leerás cuando te arreglen el ordenador o compres otro, porque ese me temo que te está timando al poder enviarme correos electrónicos pero no leer de soslayo. ¿Otro ordenador que ordena? Los despropósitos de una amiga que me exacerban el sosiego. Las noches desveladas penetran en mi mente y se extienden llevando luto por otra amiga ida, mientras el día, con sus buenas madrugadas y un cielo enrojecido de sangre por tantas decepciones asoma por el horizonte. Otro día para el olvido.
     
¿Existieron unos ojos tristes o quizá fue una ilusión, o un confusa apreciación. O una ráfaga de tormentos que arrastraron un sentimiento de sincera amistad a una trinchera en la penumbra? Que te vaya bonito, ya sabes quien te querrá siempre si un día decides volver.

4 comentarios:

  1. Quizás tu amiga prefirió mandarte el correo para que supieras lo que le pasaba porque eres su amigo. Y prefirió eso a leerte, digo yo.

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  2. Prefirió disculparse a leerme. Muchas gracias. Beso.

    Salud.

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  3. Porque para leerte se necesita tiempo no es leer por leer y si se estaba robando la señal lo que menos tenia era tiempo. Yo pienso, igual no se.

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  4. ¡Porque se estaba robando la señal! :´(

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