miércoles, 25 de septiembre de 2013

¡Joder, dona, qué país!

Siento vergüenza y tengo pena; me doy lástima por cómo les voy a dejar el país a mis hijas. Hace media hora que vine feliz de Les Seniaes y tan solo en media hora los medios de comunicación me han dejado triste de morir. Todo sigue igual y vamos a peor. Cada vez es mayor el desconcierto, cada vez mayor las injusticias, más dolor para el pueblo. ¿Qué pecados nos han llevado a esta situación? ¿Qué maldades hemos cometido? ¿Por qué este desequilibrio social? ¿Qué hace el gobierno para remediarlo... o acaso lo fomenta? ¿Por qué no podemos acceder a un puesto de trabajo si ya las cosas nos van bien según Montoro? No es ironía, es desconocimiento. La razón de los números es una locura. No entiendo. ¿Por qué tenemos que alcanzar unos porcientos imposibles? ¿Por qué en dos años y no en cuatro? Si ya no estamos en recesión mantengámonos en línea creando puestos de trabajo. ¿Seguro que hay que crecer un 2% puntos para crear trabajo? ¿Y mientras? ¿Seis millones de parados aún son pocos? ¿Bajar el SMI? ¿Quién es el analfabeto mental que quiere competir con China o Marruecos en mano de obra si sus trabajadores ganan un 90% menos que nosotros? ¿Más barata la mano de obra para qué? Así nunca crearemos empleo: nunca podremos competir con esos y otros países. Gastemos en educación e investigación. Invirtamos en nuevas tecnologías. ¿Y qué hay de la reforma del Estado? Llevamos dos años recortando a las clases más débiles de la sociedad y siguen duplicadas las instituciones. ¿Cuantos asesores políticos hay en este país? ¿Cuantas diputaciones haciendo funciones de gobiernos regionales? ¿Por qué no empiezan la casa por el tejado? Un tejado que ya no es ni los cimientos de un país. Optimizar recursos por arriba e ir bajando hasta donde se pueda o tenga que ser... Empezar a recortar por arriba. ¿Quién reparte la riqueza de un país? ¿Qué hay de los impuestos para las grandes fortunas y las grandes empresas? Devolverle la dignidad y el respeto al pueblo, el asunto es ese. El tema no es la individualidad, es la estructura de la sociedad. Esta estructura no vale, se debe construir otra menos egoísta, más colectiva y humana. ¿Son o no posibles las utopías? La educación, la sanidad, una vivienda, un puesto de trabajo, ¿son utopías? ¿Tenemos o no con qué salir de esta situación que vivimos? De cualquier modo la solución no pasa por bajar más los salarios porque jamás podremos competir con Marruecos o China en mano de obra. ¡Joder, dona, qué país!. Y qué gobierno.

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