Santo a la primera

Lo mío de ayer fue un fallo. El no darme cuenta que entraba el verano. Las mujeres dicen que los hombres no somos capaces de hacer más de una cosa bien, y que ellas sí. Cómo saben dar dónde más duele... Ayer tenía que hacer una extracción de sangre y eso a mí me obnubila la mente. Me pierde y luego pasa lo que pasa. Es solo ver la aguja y la sangre... ay. La chica, que luego fue un chico, no me hizo daño. Hubiera gritado, incluso denunciado por maltrato. Hablando de maltrato, no quiero, pero voy a tener que denunciar a una mujer del pueblo. Ella es de mucho ir a misa y darme besos y llamarme guapo. Si fuera de una edad apropiada no me importaría, pero es mucho más vieja que yo (sin nombres para no ofender). No tengo nada en contra de la gente más vieja que yo, aunque las prefiero rubias (uy, en qué estaría pensando), pero si es una chica joven es más agradable que te de un beso... A mí me gusta que me den besos. Y la verdad, esta mujer que me maltrata a besos y piropos, no me importaría si además, no se empeñara en que entre a misa con ella. Dice que si me conociera me haría Santo... que solo con que me conozca sería suficiente, ni un milagro reconocido ni dos. Santo a la primera.
 

-Calle por Dios, señora, no diga esas cosas... no irá al cielo.

-Yo no, pero tú sí. Entra conmigo y verás...

-No puedo, tengo que ir a la farmacia y cierran a las ocho.

-Voy contigo.

-¡Déjeme en paz!. A mi no me quiere, vivo en pecado. Y para suicidarme en misa no me apetece.

-No digas eso...

-Lo digo porque es verdad, como lo es que aunque no utilices paraguas, seguirá lloviendo.

-No te entiendo...

-Pues que no me acose más o se lo digo a su hija. O la Guardia Civil. Elija

-La Guardia Civil.

-Vale, entraré a suicidarme, pero solo cinco minutos... el olor a incienso me mata.

-¡Qué ilusión me haces!.

-A ver si así me deja en paz... Y ahora cerró la farmacia.

-Mañana la vuelven a abrir a las 10.

-Pero necesitaba hoy las medicinas...

-¡Qué hombre Señor!, si no fueras un Santo...

-Sería un vecino que va a la farmacia a su hora y compra las medicinas.

-O un Santo.

-Y dale.