jueves, 7 de febrero de 2013

El olvido

Después de deambular media vida sin ser capaz de distinguir la sombra que acompañé, sin reconocer el camino que seguí, sin saber por qué tantas victorias perdí.

Después de tantos sueños rendidos a la evidencia, de tantos besos ahogados en unos labios cada vez más profundos y lejanos.

Después de inventarme mil excusas cuando mi vida pasó de ser un tormento a ser causa en el infierno.

Después de tanto sepultar esperanzas en el cementerio de los imposibles, de tanto engañar a la memoria, de tanto pésame sin saber que yo era el enterrado.

Después de tantos gritos clausurados con potingues de farmacia... después de tanto y tanto de todo, ahora, ya no tengo nada que perder. Pero eso es lo de menos, lo de más es la traición que el drama contiene. Mira que estoy hablando de ti… el olvido, por decir.

6 comentarios:

  1. Después de revolcarme en esta piscina de imágenes, después de acariciar ese segurente olvido, después de leerte...
    me descubro, si es que me quedaba algo que no estuviera ya a la intemperie. En otra vida, me gustaría escribir textos como éste.
    Abrazo fuerte.

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  2. Eres muy amable, muchas gracias.

    Salud

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  3. Lo has descrito perfectamente, es todo lo que se sufre en el olvido más atroz y después de tanto... tanto. Yo también me descubro ante este magnífico texto. Mi felicitación más sincera. Un beso.

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  4. Mutuo entonces. Muchas gracias.

    Salud

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