miércoles, 8 de febrero de 2012

¿Así que, a vivirlo?

Leo en el blog de mi amiga Roxana: "Qué infierno es Buenos Aires, lluvia y aire fresco por favor. El intenso calor parece doblarnos un poco pero es verano, hay que vivirlo como una estación más, es una realidad. Así que, a vivirlo".

Nada le digo porque su blog es profesional y, aunque coincidamos en el amor por la palabra, nunca sé qué decir. Pero me hace pensar, y me doy cuenta que aquí hace mucho frío: tengo frío. Aquí estamos en invierno. Entonces... apago el ordenador, cojo el coche y me voy al pueblo de al lado, pero, (lógica) hace frío, el mismo frío que en mi pueblo. Continúo por la carretera hasta que encuentro otro pueblo, me bajo del coche y el frío es el mismo. Y no seguí buscado calor: aquí es invierno y hace frío. Así que, a vivirlo, que dice mi amiga Rox. Lo curioso fue comprobar que, cada vez que visitaba un pueblo más lejano, encontraba un pueblo más alejado... Creo que entre todos los pueblos no configuran un país. Tampoco entre todos los hombres y mujeres constituimos una sociedad. No somos el resumen de una patria. Entre nuestros pueblos hay una inmensa lejanía. Y entre nosotros no existe calor humano. Estamos demasiados alejados unos de otros. Más que el verano de Buenos Aires y el invierno de Valencia.

6 comentarios:

  1. Me parece que necesitas el calorín de Asturias, pese a lo que se diga.

    ResponderEliminar
  2. Qué no sabes que aquí lo dice canal 9... Va a misa.

    Salud.

    ResponderEliminar
  3. No olvides que los extremos se tocan...

    Saludos
    Mark de Zabaleta

    ResponderEliminar
  4. Sin Fe no hay Esperanza. Claro.

    Salud.

    ResponderEliminar
  5. Puedes venir al sur pero que coste que hace frio.

    ResponderEliminar
  6. Calor humano, AMIGO. El otro es cuestión de acercarse al brasero.

    Salud.

    ResponderEliminar