sábado, 7 de enero de 2012

¿A quién importa?

El Sabina canta: "Amores que matan". Canta ahora. Me encanta el Sabina... ay.

-Yo no quiero un amor civilizado, con recibos y escena del sofá; yo no quiero que viajes al pasado y vuelvas del mercado con ganas de llorar.

-Yo no quiero vecinas con pucheros; yo no quiero sembrar ni compartir; yo no quiero catorce de febrero ni cumpleaños feliz.

-Yo no quiero cargar con tus maletas; yo no quiero cortarme la coleta que elijas mi champú; yo no quiero mudarme de planeta, brindar a tu salud.

-Yo no quiero domingos por la tarde; yo no quiero columpio en el jardín; lo que yo quiero, corazón cobarde, es que mueras por mí.

-Y morirme contigo si te matas, y matarme contigo si te mueres, porque el amor cuando no muere mata, porque amores que matan nunca mueren...

Joaquín Sabina poeta: si además cantara bien... Entonces... Intensidad en las palabras y entusiasmo. Sabina amanecer a una vida desconocida. Sensaciones tibias, tentadoras y excitantes. Joaquín Sabina mágico... fantástico... soñador... Falaz. Alma espiritual. Centro de un universo desconocido justo a la medida de su tiempo que no es principio ni fin, porque decir no es decidir para él. Ni puede ser equilibrio. Joaquín Sabina una hoja en blanco, y todos los caminos libres para que una canción o un ensueño; para que un amor... quizás una fantasía. Porque para seguirle y aceptarle como es; porque para caminar con él se tiene que ser él. Cuando un día ya no exista, Joaquín Sabina poeta, las nubes que bailan al compás de una canción se desintegrarán: Agua. Y solo quedará el rastro de una noche rota, increíble en el recuerdo de ese día escondido tras un poema. Sábado de los fieles difuntos. Será además un sábado antiguo y sobrio para cantar que no envejecerá... Un sábado sencillo y bullicioso. Un sábado de noche luminosa, desolada tal vez. Sábado de ausencias para siempre. Tarde de nostalgias. Joaquín Sabina. Qué si no es persona de decir siempre la verdad... ¿A quién importa?

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