sábado, 21 de enero de 2012

Eso es amor

Una amiga es un tesoro, no tiene precio, eso dicen. Y ciertamente es un tesoro que se debe cuidar y valorar y preservar. Una amiga, incluso la mejor, no es perfecta, como no lo eres tú o yo. Pero su valor va más allá de los defectos, su verdadero aprecio está en su alma, en su corazón, en sus intenciones, en su integridad, en su empatía, en su sinceridad. Una amiga no puede ser un dolor de cabeza, si lo fuera dejaría de ser verdadera y por tanto no sería una amiga, sino un sábado de los fieles difuntos. Una amiga es un tesoro, no tiene precio, eso dicen. Pero no se audita, se la valora objetivamente y se la reconoce por sus acciones en la balanza de las probabilidades: ¿Qué pesan más sus defectos o su risa? Y luego está su belleza que solo supera el poder de su mirada... es su más convincente argumento de amor.

-Amigo, es cuanto sabes decir...
-Aprende a interpretar mi ausencia...

No hay comentarios:

Publicar un comentario