"El mayor descubrimiento de mi generación es que los seres humanos pueden mejorar sus vidas con solo cambiar sus actitudes mentales". William james.
Cambiaremos de actitudes mentales solo cuando la realidad que nos tocó vivir nos lo permita. Corren malos tiempos para cambiar nuestras actitudes mentales, incluso con ayuda. Acabaremos todos y todas pidiendo auxilio en los centros de salud mental. Si seguimos en este plan antes o después acabaremos perjudicando el alma irreversiblemente. Yo mismo me recuerdo con la cara optimista y alegre paseando por las calles de mi pueblo. Y no hablo de los tiempos del cuplé. Como esto no es un tango ni un canto a la miseria, es una opinión de café con mis cosas, confieso que sigo teniendo la misma cara optimista y alegre, pero que ahora no me atrevo a sacarla a la calle. Lo que diferencia una cara optimista y alegre de otra pesimista y triste, es la realidad que nos tocó vivir. Imposible realidad que no podemos cambiar con buenas palabras ni promesas. Hay frases para enmarcar, y la de William James filósofo pudiera ser una. Pero en otros tiempos y con otros ánimos. "Lo que no te mata te hace fuerte". "Los huracanes hacen más fuertes y profundas las raíces de los árboles". "De la lucha diaria surge la fuerza para avanzar". "Del dolor del alma se aprende a ser más fuerte". No hay aptitudes mentales que poder cambiar ni fuerza de voluntad cerrada por vacaciones. Lo que hay son experiencias negativas a tutiplé. Así uno no se atreve a salir de casa con la cara optimista y alegre. Además, si me cruzara con un político o un banquero que no bancario... ¿Si yo estaba tan feliz qué me ocurre ahora?
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