lunes, 22 de agosto de 2011

Hablo de él

Hablo de él para decir que no recuerda quién es porque duda de que haya existido, porque no tiene certeza de su obra conocida, porque su sombra ya no lo sigue, porque nunca tuvo excesos, y, porque triste está la princesa... ¿qué tendrá la princesa? (Ni siquiera recuerda lo suficiente).

Uno de cuando en vez debe arreglárselas para salir de casa, silenciar la lengua y encontrar los conceptos más allá de las palabras. Pero le cuesta... vaya si le cuesta. Porque un día se siente incapaz de peinar el cabello que en parte le cubre la cabeza y otro día se le olvida. Así las cosas... así él y su memoria... Pero como una cuerda que salta enroscada de una guitarra usada, fatigada y tensa, la palabra escrita que es su puente de acceso con el mundo exterior, su escudo y su arma. La palabra que le da la posibilidad cierta de expresar sus sentimientos, sus ideas y sus opiniones, ahora también le está fallando, le abandona a veces. Incluso él a veces se rezaga con el engranaje que sincronizadamente le debiera simultanear con su mente y se confunde, pierde la noción, se cae, y se desparrama por el suelo... Y las ideas que le siguen fluyendo de su mente a borbotones no cobran sentido al no encontrar el soporte necesario... Sin embargo, al recobrar la noción, y aún en el suelo, dice que daría lo que no tiene para que su mente rota no volviera a reconstruir sus pedazos, porque es feliz, y el precio que paga es apenas: Le gusta ser como es. A pesar de los pesares no piensa claudicar por lo mucho que ama a la vida y al amor. Y a la santa poesía.

Y ama tanto...

Que seguirá donde todo comenzó,
y a escondidas si es preciso,
amando lo que tanto ama.
Amando seguirá
hasta que el poeta Ángel González le convoque
y lo ofrezca en eterno sacrificio.

Y escribiendo...

Que seguirá escribiendo
aunque las palabras le fallen o le abandonen para siempre.
Y entonces, mudo de palabras,
te buscará en el silencio
y te hablará de ti...
y le hablarás de él...

Tú, su inspiración.

Él, tu poeta.

No hay comentarios:

Publicar un comentario